Séptimo
Sebastián (Ricardo Darín) y sus hijos juegan cada día a ver quien llega primero a la calle desde su casa en el séptimo piso, el padre por el ascensor y los niños por las escaleras. Un día Sebastián se encuentra con que los niños no bajan y tampoco se han quedado arriba, simplemente han desaparecido. A partir de aquí se desarrolla una búsqueda por el edificio por parte de Sebastián y Delia (Belén Rueda), la madre, en busca de sus hijos desaparecidos.
Estamos ante un Thriller que sabe hacer que nos pongamos en la piel del protagonista. Lo cotidiano de la situación queda plasmado en un realismo al principio del film que provoca una tensión extraordinaria. Esta tensión luego se deja caer en lo previsible, en tópicos y en lo que nadie quiere en una película de este tipo, que es la falta de suspense. Sin embargo el siempre genial Darín se encarga de transmitirnos la angustia y desesperación, y de lo que un padre es capaz de hacer por sus hijos.
El Juego de Ender
La que podría haber sido una gran adaptación de la aclamada novela de Scott Card se ha quedado a mitad de camino sin dejar de ser entretenida para el espectador. Si el director Gavin Hood hubiese dado más relevancia a la genialidad del personaje de Ender y las relaciones con quienes le rodean en lugar de convertir el film en otra muestra más de lo avanzada que está la tecnología y en lo espectaculares que son los efectos especiales hoy en día, hubiese mantenido la esencia y frialdad que hubiesen hecho de El Juego de Ender algo diferente.
Sin embargo, y dejando de lado las comparaciones con la novela, se trata de un film que entretiene, que sorprende y que da que pensar y debatir entre los espectadores, ya que goza de grandes valores y moralejas entre tanto efecto visual.
Stockholm
Estamos sin duda ante un genial film que contiene todo lo que necesita para cautivar al espectador. El guión es impecable, los personajes muy bien construidos e interpretados por Pereira y Garrido, la trama te mantiene siempre enganchado… Gracias a films como este el cine de casa merece que se le preste más atención y esperemos que Rodrigo Sorogoyen, que se ha llevado bien merecido por su dirección de Stockholm el premio del Festival de Málaga a mejor director, nos vuelva a impresionar tan gratamente en un futuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario