No vamos a negar, que la figura del asesino en serie en la ficción está de moda. Esto se lo debemos en gran parte a Dexter, el asesino en serie favorito de América, aunque obviamente no es el único, ni fue el primero. Yo, como fan incondicional suya, no pude evitar interesarme por la figura del psycho killer. Además, no era el único, Death Note es mi anime favorito y American Psycho es una película que me encanta. #LoveSerialKillers
Tras ser consciente de todo esto, decidí centrar mi proyecto final de fotografía en ellos y como he quedado bastante contenta con el resultado (lástima que mis profesores no tanto) quiero enseñároslo, así que si he conseguido que os entre la curiosidad, seguid leyendo.
Lo primero estaba claro, tenía un tiempo y unos recursos limitados por lo que era imposible escenificar a todos los asesinos en serie de la ficción más o menos importantes. Por lo que me dejé en reserva para un futuro joyas como Hannibal Lecter o Norman Bates. Pensé que tres era un número perfecto para desarrollar y que teniendo una película, una serie y un anime cubría bastante terreno, lo necesario ahora era enlazar estos tres mundos tan parecidos y tan dispares a la vez.
Tenía claro que quería que la protagonista fuera una mujer en lugar de un hombre así que me decidí a crear mi propia historia. Para entenderla, es necesario conocer como mínimo el argumento de American Psycho, Dexter y Death Note (pueden contener algún pequeño spoiler, pero nada demasiado destacable):
El personaje principal es una chica de la que su padrastro abusaba cuando era una niña y tras escapar de él, su suerte no fue a mejor ya que por el camino siguió encontrándose con hombres que de una forma o de otra terminaban haciéndole daño. Su historia pasada tiene mucho del personaje de Lisbeth Salander de la saga Millenium: ambas sufrieron abusos en la infancia, tienen una apariencia frágil, los hombres no las han tratado bien por lo que están cansadas de ser siempre las víctimas y a veces recurren al disfraz para pasar desapercibidas; (los piercings que tiene la chica que hace de la protagonista en las fotografías son un pequeño guiño a Lisbeth). A pesar de parecerse tanto, mi protagonista se diferencia de Lisbeth en que decide convertirse en la asesina en serie perfecta: lo que hace es matar a hombres que han hecho daño a otras mujeres imitando a otros asesinos en serie para no utilizar siempre el mismo modus operandi y no ser descubierta. A partir de entonces su símbolo será una trenza rubia, que llevará siempre en el pelo. No tiene por qué ser siempre una trenza entera, esta variará según al personaje que esté interpretando, por ejemplo en las fotografías de Death Note lleva la melena suelta y dos trenzas pequeñas porque su estética es parecida a la de Misa Amane. Su primera víctima es un compañero suyo de trabajo al que le gusta matar prostitutas (aquí decidí coger una característica de Patrick Bateman y añadírsela a la víctima en lugar de a la protagonista) por lo que lo invita a su casa para investigarlo y matarlo posteriormente pero el hecho de que él ponga su bebida fuera del posavasos hace que se enfade y decida matarlo allí mismo. Para su segunda víctima está un poco mejor preparada, y tras una serie de investigaciones descubre a un hombre que ha matado a dos mujeres por lo que decide seguir las pautas de Dexter a la hora de matarlo. Tras obtener el Death Note, va por la calle de noche cuando ve a una chica con la que se identifica, no solo por ser rubia y llevar una trenza si no porque está siendo atacada por un hombre malo. Decide matarlo y salvar a la chica.
Os dejo tres presentaciones de diapositivas con las fotografías y la página de facebook dónde también están subidas, además de los pósters y algunas fotos del making of.
Si os ha parecido interesante, tengo bastante material para un par de entradas más ya que he tenido que hacer memoria y demás parafernalias típicas de los proyectos y algunas partes son interesantes, como es estudio de los diferentes tipos de asesino en serie o los storys de las fotografías.
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