En Versión Seriéfila los fans de The Good Wife no somos muchos, el número se limita a dos, de hecho, BlueJon y una servidora, pero aunque seamos pocos, somos MUY fans de la serie, tanto, que cuando vimos el quinto episodio de la presente temporada de la serie creada por el matrimonio King, no pudimos contenernos y escribimos no una, si no dos entradas, ambas publicadas a la vez y con el mismo nombre, pero dos al fin y al cabo porque The Good Wife da para mucho. Es una perla de la que hay que hablar, especialmente cuando ofrece tanto como lo ha hecho en lo que llevamos de temporada y se merece la mayor difusión posible ya que, por desgracia, es una de esas gran incomprendidas escondida en las etiquetas que algunos se empeñan en seguir manteniendo.
Todo ese "desprecio" por parte de algunos hace que los que somos fans aún la defendamos más y la protejamos bajo nuestra ala cual madre protegiendo a sus polluelos y es también por eso, que cuando el pasado mes de agosto, Graham Phillips, el actor que interpreta a Zach, el hijo de Alicia Florrick en The Good Wife, publicó este tweet, a nosotros no sólo se nos hizo la boca agua, si no que además nos empezamos a agitar y a proclamar a los cuatro vientos las ganas que teníamos de que llegase ese momento. Pues bien, ese momento llegó el pasado domingo y, tal y como esperábamos, no decepcionó un ápice.
La base estaba creada, el final de la cuarta temporada nos había dejado a todos expectantes y la sensación de que algo MUY grande estaba por venir. Sin embargo, todos pensábamos, o al menos yo lo hacía, que la quinta temporada empezaría con la marcha definitiva de Alicia y Cary para comenzar su propio bufete o incluso con este ya formado y cuál fue nuestra sorpresa al ver que esta comenzaba exactamente donde acabó la cuarta: con ambos en el umbral de la puerta de ella y Cary recibiendo el "I'm in" de Alicia. Desde ese momento, la temporada se ha dedicado a aumentar el número de escalones de una escalera que ya se había empezado a construir meses antes. Una escalera que cada vez se veía más inestable y es que, por momentos, parecía que el salto que iba a dar Alicia al dejar un bufete sólido que además le ofrecía ser la nueva socia administrativa nos hacía olvidar que estábamos emocionados por el nuevo paso en su carrera. Pero ella siguió adelante, fiel a su decisión de formar su propio bufete, fiel a dejar atrás Lockhart/Gardner. Fiel a la decisión de dejar a Will.
El gran traicionado.
Si hay algo que creo que todos queríamos ver como consecuencia de la marcha de Alicia era la reacción de Will. Cómo se tomaría el "abandono" definitivo de ella era una de las grandes cuestiones y, dejando a un lado ese trío amoroso que, de manera inteligente, la serie decidió dejar atrás o, al menos, en un bajo perfil, la pasada temporada, lo cierto es que Will podía sentirse traicionado por muchos motivos.
El haber confiado ciegamente en ella durante todos estos años, apoyándola para conseguir cosas que, honestamente, de no haber sido ella su punto débil podría no haber conseguido y, por supuesto, el seguir enamorado a pesar de todo, han acabado en una expresión de incredulidad tal que creo que se lleva el premio en un episodio perfecto, ese maravilloso 'Hitting The Fan' en el que es muy difícil dar premios.
Esa manifestación de escepticismo por parte de Will, quien no es capaz siquiera de dejar de balbucear la palabra "she", seguido de un ataque de ira dirigido al objeto de la traición es, en mi opinión lo más destacable de un episodio lleno de interpretaciones grandiosas y en el que todos y cada uno de los actores dan lo mejor de si mismos para mostrarnos el rango de sentimientos por los que sus personajes pasan en tan sólo 43 minutos
El animal que todos llevamos dentro.
Will no es el único que muestra su lado más salvaje. Las palabras que le dirige a Kalinda diciéndole, básicamente, que va a atacar a la yugular de toda su competencia y que necesita saber en quién confiar para hacerlo demuestran que ella también ha elegido bando. O no, porque con ella nunca se sabe y nos lo vuelve a recordar en este quinto episodio, al engañarnos a todos, empezando por Cary, para sacarles información y luego dársela a Will y así perjudicarles. Ante tal jugada tú, como espectador, no puedes más que sentirte profundamente traicionado y, a la vez, levantarte del sofá a aplaudirla por la manera en la que te la ha colado, pero esa es Kalinda, ese es el personaje que nos conquistó en la primera temporada.
No son los únicos que sorprenden en este episodio y es que todos muestran facetas suyas que no conocíamos o estaban eclipsadas por otras. Es el caso de Cary, por ejemplo, demostrando que como abogado puede ser tremendo, pero como defensor de su causa personal es un metepatas de cuidado o de Peter que, aunque ya nos había enseñado su lado más "mafioso", en este episodio ha dejado claro que no va a dejar que nadie interfiera con los asuntos de su mujer si él puede evitarlo y que él no olvida y puede ser peligrosamente rencoroso.
Pero no me puedo omitir de mis dos personajes favoritos, una Alicia que ha sacado las garras para defender su honor herido y, sobre todo, una Diane que ha tenido que sopesar muy en serio los pros y contras de verse involucrada en este escándalo y que se ha mostrado extremadamente contenida con tal de velar por su propios intereses tras haber puesto en serio riesgo su futuro laboral como juez del Tribunal Supremo. De Christine Baranski no puedo decir más que elogios habitualmente, pero el juego que se la ha dado durante estos primeros episodios de la temporada y, especialmente, esa mirada asesina que dirigió a Alicia al final del cuarto tras enterarse de que esta se marchaba con algunos de sus mejores clientes han sido ORO PURO. Así, en mayúsculas, porque ella es oro puro, como el de los joyones que lleva siempre al cuello.
Los grises de The Good Wife
Si algo forma el universo de la serie de CBS es el juego de grises. Nunca ha sido blanca o negra si no que ha sabido mantenerse en ese espectro de color en el que sabe moverse como nadie, enseñando poco pero mostrando mucho. No es casual que, por ejemplo, Alicia lleve durante casi todo el episodio un traje chaqueta gris y que este sólo cambie en los últimos minutos, cuando el trato con Chumhum se ha cerrado y un traje azul oscuro representa el horizonte de Florrick, Agos & Associates.
The Good Wife siempre ha mostrado que sus personajes están llenos de imperfecciones y que su protagonista es la más imperfecta de todas. Paradójicamente, todas esas imperfecciones la hacen perfecta a nuestros ojos. Santa Alicia, a la que le permitimos todo sabiendo que, en el fondo, no deja de ser una afortunada que tiene mucho más de lo que debería de tener y que, si lo tiene, es que porque siempre ha estado perfectamente rodeada de gente que, de una manera o de otra, le ha ayudado a escalar. No me malinterpretéis, yo la defiendo a ojos cerrados y defiendo su posición, pero no deja de ser curioso que algo que vemos tan justo en The Good Wife, nos parecería una absoluta injusticia en la vida real. Y eso, señoras y señores, es una lección de cómo hacer una buena ficción, porque no se trata solamente de hacer un producto que te mantenga entretenido durante X minutos, si no crear un universo que te haga replantearte el tuyo propio, que invada tus pensamientos y que te haga olvidar que tú tienes una vida pero que, desgraciadamente, no será tan perfecta como la de The Good Wife.
Me despido con el gif estrella del quinto episodio, perfecto para cualquier ocasión.
En cuanto vi el capítulo le dije a Sandra por twitter que se merecía una review aquí y no hay una sino dos, para disfrutarla el doble. Gracias a los dos. Y bueno ahora no sé en cuál comentar el capítulo, así que lo haré en las dos, espero no repetirme mucho.
ResponderEliminarMe quito el sombrero que no tengo con este capítulo y con esta review. CAPITULAZO!!!!! En mayúsculas, en negrita y con letras de oro. Sin duda el mejor capítulo de toda la serie, "in my opinion".
Lo primero de todo es que no sabía que Graham Phillips era el que lo había comparado con "Red Wedding", así que gracias por el dato, y muy acertada la comparación (aunque imagino que muchos fans de GOT que no han visto nunca TGW no estarían de acuerdo).
De acuerdo con el premio a la "expresión de incredulidad" de Will, una de las mejores escenas del capítulo, esos segundos en los que su cara se va transformando poco a poco. Aunque yo no le daría el premio a esa escena, bueno más bien no solo a esa, sería incapaz de elegir entre tantas escenas que son puro oro. Uniría esa escena con la siguiente, por el pasillo hasta el despacho de Alicia, cómo le pregunta todo “tranquilamente”, para terminar saltando de ira y tirando todo lo de su mesa.
También me quedo con la escena del juzgado, luchando por el cliente, ese gran David Lee y su momento Judas! Y la reacción posterior de Alicia, faltaban aplausos y vítores por detrás.
Y la que sí es para mí la mejor escena del capítulo y me extraña como ninguno la ha mencionado, es esa llamada entre Alicia y Will, con ese Go to the hell! Seguido de Will diciéndole que su hija la ha llamado, simplemente genial ese te odio pero no para tanto ¿Cómo pueden estar gritándose y acabar con un gracias?
Kalinda: hbfakjhfcjdn eso es todo lo que puedo decir, 100% de acuerdo con tu comentario:"no puedes más que sentirte profundamente traicionado y, a la vez, levantarte del sofá a aplaudirla". La maldita nos consigue engañar siempre, y por eso me encanta, pero no me ha gustado que los haya traicionado (aunque tampoco sería de extrañar que cambiara de bando dentro de algunos capítulos).
Y me quedo con tu frase "crear un universo que te haga replantearte el tuyo propio", es verdad, no me había dado cuenta pero tienes toda la razón, con otras series si ve más claramente eso (como en Dexter o Sons of Anarchy, estoy en contra de la violencia, pero en estas series las justificas y las defiendes y te enfadas cuando no son así). En esta aunque no se ve tan claro pero también es así, en la realidad Alicia sería una enchufada, con un marido en el poder que consigue todo lo que quiere solo por eso y todos la odiaríamos; pero cuando te pones a ver un capítulo de TGW como llegas a adorar a Alicia.
Genial el gif de despedida, me enamoré de él en cuanto lo vi :)
Gracias por la review y por el repaso a uno de los mejores capítulos de este año seriéfilo.
Debe ser la ceguera de cuando amas un personaje #TeamAlicia por que leo en blogs y review, todo esto de como que Alicia sin el esposo o Will, no es nadie. Es como que si bien Peter tiene muchos contactos, olvidan que fue ella y su imagen o lo que sea la que lo devolvió al poder. Entiendo la reacción de Will y demás, pero ella se gano un lugar en ese bufete, por que las 5 temporadas estuvo trabajando y mucho.
ResponderEliminarY lo de las garras, no lo entiendo. Como querían que actuase?, ella nunca a sido una estúpida, y mucho menos una mosquita muerta, siempre han planteado un personaje en extremo introvertido, y reservado, incluso con su familia pero de armas tomar también. Defiende a capa y espada su vida privada y sus hijos, incluso a su esposo. Decidio irse, y no podía actuar ni ser menos a esa decisión. No comparto esas ideas donde la ponen a ella como una santa y ahora como una diabla, creo en los matices, en las circunstancias, en los contextos. Creo que han dejado ver una mujer fuerte, decidida y han salido un poco del patrón de la llorona, vulnerable todo el tiempo o descontrolada, dominada por sus sentimientos y es que Alicia no es asi, y esa manera enigmatica de ser es lo que la hace especial.