Review Malibú Country: Del piloto y otros desastres

  

A pesar de que ya hice un breve comentario sobre el piloto (que se puede leer aquí), creo que la inmensidad de esta serie merece una entrada propia y algo más extendida. La inmensidad. La inmensa mierda que es esta serie quiero decir.

Malibu country es como entrar en un #túneldeltiempo y aterrizar en el sofá de tu casa merendando y viendo las series que echaban en La2 en los noventa al salir del cole. Y por lo que veo, creo que en esa época o no teníamos criterio o no teníamos opción.

La historia es la de una excantante de country que deja a su marido y se lleva a sus hijos y su madre a California para triunfar en la música. Típica historia de personaje/familia fuera de lugar. El punto de partida es fácil y topicorro pero que se podría aceptar si ofreciera algo más. Claramente Malibu Country no consigue esto. Ni se acerca.

Si los decorados interiores ya se ven falsos los exteriores son horribles. Bueno exteriores, la terraza que es lo más exterior que se ve. Las escenas de gente conduciendo en este tipo de series no suelen brillar precisamente por su calidad pero aquí es tan mala que hace más daño a los ojos que quitarte las legañas con limón.

La protagonista que nos quieren vender como heroína (izq), la vecina y la abuela (Lily Tomlin) en la indescriptible terraza.

Los personajes son todos más tontos que una ameba. No sólo los escritos así a propósito (supongo) como la vecina entrometida o el hijo deportista y sin luces (¿dónde habré visto yo esto antes?). La hija es repelente y crédula, la protagonista falta de carisma e interés... El punto más cómico que pretende ser la abuela es un personaje que lo hemos visto tanto y está tan manido que si fuera negra saldría en Cosas de Casa.

Decir "Sweet" debe ser muy gracioso y yo me he perdido algo (difícil en esta serie). Eso, o las risas enlatadas se oyen incluso cuando no se hacen chistes. Las ponen cada cierto tiempo porque toca #risassinsentido. Al mando del botón de risas debe estar el pajarito de juguete de Homer Simpson.

Una escena con el pajarito de Homer Simpson era más graciosa que todo este piloto.

El momento profundo que, me apuesto medio hígado, van a tener todos los episodios no funciona por ser tan previsible como poco inspirado.

Me quedo con una frase que dice un personaje recepcionista y que parece que se convertirá en amigo de la familia en referencia a los cantantes: "A nadie le importa la voz, tenemos ordenadores para eso." Pues parece que parece que los creadores la han aplicado aquí para todo "a nadie le importan los chistes, tenemos risas enlatadas", "a nadie le importa el decorado, tenemos el la casa de Zac Morris"... Eso sí, debe haber salido baratísimo sin pagar guionistas ni escenarios.

La originalidad de esta serie parece consistir en hacer una serie de los noventa, con decorados de los noventa, con personajes cogidos de series de los noventa; mezclarlo todo con chistes sin gracia, ¡y esperar que salga algo bueno! ¡Eh! Si funcionó hace 20 años, ¿por qué no ahora? ¡Qué genialidad! Reconozco que pensar que una serie sin gracia y viejuna pueda funcionar es muy original, a mi no se me habría ocurrido.

En fin, me reitero en el consejo que dí cuando comenté el piloto: huid de esta serie si no quereis convertiros en Tim Allen de mayores. Un desastre de tales proporciones que ni siquiera Lily Tomlin (la abuela) va a salvar. ¡Quiero que me devuelvan mis 20 minutos de sueño que me quitó este piloto!

#túneldeltiempo #risassinsentido #noquieroserTimAllen